¡Si me olvido de ti, oh JerusalénA consecuencia de confirmar el reconocimiento oficial de los Estados Unidos, a Jerusalén como capital indiscutible de Israel, salieron artículos, reuniones y declaraciones en contra y a favor en diferentes lugares.
Un articulo del conocido columnista Jorge Dávila Miguel [ver ¡Oh, Jerusalén…!, Perspectiva, 15 de diciembre] entre otras consideraciones dice: “Como todos sabemos, Trump declaró la semana pasada a Jerusalén como la capital de Israel con la misma serenidad con que se toma un jugo de naranja”.
Un articulo del conocido columnista Jorge Dávila Miguel [ver ¡Oh, Jerusalén…!, Perspectiva, 15 de diciembre] entre otras consideraciones dice: “Como todos sabemos, Trump declaró la semana pasada a Jerusalén como la capital de Israel con la misma serenidad con que se toma un jugo de naranja”.
Comparar el tema sagrado para millones de personas con tomar un vaso de jugo de naranja es una ligereza grave.
En Jerusalén, capital eterna del judaísmo según la Biblia reconocida por la gran mayoría de las religiones, hay santos lugares de religiones cristianas, musulmanas y otras y siempre se están bajo atenciones y respetos merecidos.
En ningún país musulmán y especialmente en sus santos lugares no permiten iglesias o sinagogas pero en Israel, incluyendo Jerusalén, están con absoluto respeto y libertad todas las religiones.
Trump no declaró sino recordó al reconocer a Jerusalén como capital indiscutible de Israel.
José Weiss
Bal Harbour
Fuente: Nuevo Herald
Junto a los ríos de Babilonia
137 Sentados junto a los ríos de Babilonia,
llorábamos al acordarnos de Sión.
2 En los álamos que hay en la ciudad
colgábamos nuestras arpas.
3 Allí, los que nos habían llevado cautivos,
los que todo nos lo habían arrebatado,
nos pedían que cantáramos con alegría;
¡que les cantáramos canciones de Sión!
4 ¿Cantar nosotros canciones del Señor
en tierra extraña?
5 ¡Si llego a olvidarte, Jerusalén,
que se me seque la mano derecha!
6 ¡Que se me pegue la lengua al paladar
si no me acuerdo de ti,
si no te pongo, Jerusalén,
por encima de mi propia alegría!
7 Señor, acuérdate de los edomitas,
que cuando Jerusalén cayó, decían:
«¡Destrúyanla, destrúyanla hasta sus cimientos!»
8 ¡Tú, Babilonia, serás destruida!
¡Feliz el que te dé tu merecido
por lo que nos hiciste!
9 ¡Feliz el que agarre a tus niños
y los estrelle contra las rocas!
En ningún país musulmán y especialmente en sus santos lugares no permiten iglesias o sinagogas pero en Israel, incluyendo Jerusalén, están con absoluto respeto y libertad todas las religiones.
Trump no declaró sino recordó al reconocer a Jerusalén como capital indiscutible de Israel.
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