El diario Jerusalem Post, uno de los más influyentes de Israel, ha puesto de relieve el martes (8) el número de registro de los judíos brasileños que emigraron al Estado judío.
Según el reportaje, su motivación no es el antisemitismo que enfrentan muchos judíos en otros países, sino de escapar de la crisis actual y, sobre todo, la violencia urbana.
La inmigración a Israel, o Aliyá, a partir de Brasil se ha más que duplicado en los últimos cuatro años, de 191 en 2011, a más de 400 judíos este año. En comparación, el promedio de crecimiento de la Aliyá, en América Latina en el mismo período fue de sólo el 7%.
Aunque aproximadamente la mitad de la población judía la tiene la vecina Argentina, Brasil fue el país latino que envió más inmigrantes a Israel durante dos años consecutivos.
Se calcula que 120.000 judíos viven en Brasil. El año pasado fue fundada la Beit Brasil, una organización no gubernamental con sede en Israel para ayudar a los brasileños que deseen trasladarse a Israel.
El diario entrevistó a varios brasileños que han optado por vivir en Israel, lo que demuestra que la preocupación de la mayoría es un “futuro mejor”. A pesar de que vivir en suelo israelí significa lidiar con la amenaza constante de los palestinos, los brasileños creen que son más seguros allí que en el país donde nacieron.
Para el Jerusalem Post, Brasil es “uno de los países más sangrientos en la Tierra”, recordando las estadísticas que más de 58.000 personas tuvieron una muerte violenta en 2014. El analista Robert Muggah, afirma: “Más personas mueren cada año en Brasil por medio de la violencia intencional que en cualquier otra parte del mundo, incluyendo la mayoría de las zonas de guerra del mundo combinadas”.
El diario también muestra cómo la crisis económica está aumentando provocando que los judíos brasileños busquen una mayor estabilidad. Al final, el regreso de la inflación, la devaluación del real frente al dólar y el desempleo rampante, crea una gran incertidumbre sobre lo que ocurrirá en el país.
Regreso profético
No sólo son los brasileños que aún están aumentando las tasas del Aliyá. En 2014, 26.429 inmigrantes judíos llegaron a Israel. Un gran salto en comparación con 19.012 en 2013. La expectativa es que, este 2015 termine con un incremento superior al 40% en comparación con el año anterior.
El origen de la mayoría de los olim como se les llama a los judíos que regresan a Israel son: Ucrania (26%), Francia (25%), Rusia (21%) y los EE.UU. (9%).
Según el Times de Israel, en el primer semestre de 2015 se llegó a 3.756 judíos de Rusia y la vecina Ucrania casi 6.000. Un aumento del 52% en comparación con 2014.
Ellos huían del clima de guerra entre los dos países. Después de los atentados en Francia el mes pasado, cientos de judíos franceses enviaron sus documentos para inmigrar a Israel.
Pero la gran sorpresa de este año fue la aprobación del Aliyá de 9000 etíopes, lo que constituye el mayor bloque étnico. Según la tradición, los judíos viven en Etiopía desde hace 3000 años, desde la época del reinado de Salomón.
Para los estudiosos de la profecía, es significativo que estas cifras aumentarán tanto en un año en que los rabinos han hablado una y otra vez de la venida del Mesías. El rabino Chaim Kanievsky, una autoridad líder en el ultra-judaísmo ortodoxo, ha pedido que todos los judíos retornen a Israel tan pronto como sea posible. El entendimiento es que esta es una acción espiritual que marca la venida del Mesías judío.
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