TORONTO. Un cura católico canadiense está bajo investigación luego de haber admitido a su superior que apostó y perdió unos 380 mil dólares que estaban supuestos a ser utilizados para apoyar a los refugiados iraquíes en Canadá.
El diario Toronto Star reportó que el cura Amer Saka, de la Iglesia Católica St. Joseph ubicada en Londres, Ontario, informó al obispo Emanuel Shaleta por vía telefónica, en una llamada ocurrida el 23 de febrero pasado. “Me dijo perdí el dinero y le pregunté cómo, él respondió apostando, contó el obispo.
La Policía de Toronto declaró que pese a las declaraciones se mantiene una investigación, por lo que no se ha acusado oficialmente al sacerdote.
La diócesis ha solicitado la entrega de 20 casos de refugiados desde Irak. De ellos, por lo menos diez de los casos han sido admitidos ya al país.
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