La conocida Fontana di Trevi, situada en el centro de Roma, cerca del Vaticano, será cubierta en “sangre” el 29 de abril. Las luces especiales de color rojo darán este efecto que es parte de una campaña de sensibilización promovida por la organización “Ayuda a la Iglesia Necesitada” (AIN).
Es un recordatorio de la verdadera sangre, derramada por estos cristianos perseguidos que murieron a causa de su fe.
De acuerdo con la World Religion News, se confirmó la presencia del presidente internacional de AIS, el cardenal Mauro Piacenza, y el obispo de Alepo (Siria), Antonie Audo. También deben participar representantes de las organizaciones Christian Workers Movement, Caritas Italiana, Communion and Liberation y Focolare Movement.Programa para acontecer a las 20 horas (hora local) el próximo viernes, el evento tiene como objetivo “dar voz” a los hombres, mujeres y niños de gran parte del mundo, incluso sin saber si fueron mártires.
Independientemente de su denominación (evangélica, católica u ortodoxa), los millares de cristianos que son perseguidos, sobre todo en los países musulmanes, siguen siendo ignorados por organizaciones tales como la ONU.
AIS emitió una nota apelando para que “la violación sistemática del derecho a la libertad religiosa, especialmente en detrimento de los cristianos, deba convertirse en un tema central del debate público”.
La mayor persecución de la historia
No había estadísticas hace más de mil años, comparado con el número de la población de hoy, podemos decir que los seguidores de Jesús nunca han sido tan perseguidos. La situación es especialmente difícil en el Oriente Medio, la cuna de las religiones más importantes del mundo.
La creciente persecución está impulsada principalmente por el extremismo islámico. Los medios de comunicación a menudo minimizan los hechos, a clasificación de “limpieza étnica”, pero el hecho es que la cristianofobia es real.
Después de todo, el 80% de los actos de persecución religiosa en el mundo está en contra de los cristianos, dice la Sociedad Internacional para los Derechos Humanos, una ONG alemana. Según el Centro para el Estudio del Cristianismo Mundial, del Seminario Gordon Conwell de los EE.UU., más de 100.000 cristianos son asesinados cada año, es decir, 11 cristianos por hora.
Los datos publicados por Puertas Abiertas a principios de 2016 muestran que seguimos en una escalada histórica de la persecución cristiana. En promedio, un cristiano muere cada cinco minutos a causa de su fe.
“Los niveles de exclusión, discriminación y violencia contra los cristianos no tienen precedentes. Se está extendiendo e intensificando”, dijo David Curry, presidente de Open Doors EE.UU. El informe de la misión muestra que, en 2015, más de 7.000 cristianos fueron asesinados por su fe y alrededor de 2.400 iglesias fueron atacadas o dañadas, los índices muestran un aumento de más del 100% en comparación con 2014.
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