La elección de Donald Trump sigue repercutiendo en el mundo árabe. Él dijo que sería “el mejor amigo que Israel ha tenido”, y que iba a cambiar la embajada de Estados Unidos de Tel Aviv a Jerusalén. Esta acción diplomática podría influir en otros países a hacer lo mismo, una oposición flagrante con la política exterior de la administración Obama.
Brasil, por ejemplo, ya no reconoce a Jerusalén como la capital de Israel.
Mansour sostiene que la medida anunciada por Trump sería “un desafío flagrante a los derechos de Palestina”. Él insiste en la tesis de que Jerusalén Oriental estaría “ocupada” por las fuerzas israelíes”.El enviado de Palestina ante la ONU, Riyad Mansour, amenazó con hacer la vida “miserable” a la embajada de Estados Unidos si salía de Tel Aviv, donde están la mayoría de las embajadas.
Los palestinos han amenazado con “contra atacar”. En su discurso, él considera que la transferencia de la embajada de Estados Unidos a Jerusalén es como un “acto de beligerancia” equivalente a una declaración de guerra.
Sin embargo, el choque se llevaría a cabo en el campo diplomático.
“Nadie nos puede culpar por hacer uso de todas las armas que tenemos en la ONU para defendernos, y tenemos muchas armas en la ONU”, amenazó. Él dejó claro: “Podemos hacerle la vida imposible a los Estados Unidos cada día, pidiendo la precipitación de un veto sobre la admisión [de Palestina] como un Estado miembro”.
Para mayor comodidad, él prefirió ignorar que hacer junto al Consejo de Seguridad de la ONU que es poco probable, ya que Washington tiene poder de veto. Mientras tanto, David Friedman, asesor de asuntos relacionados con Israel, reiteró poco después del anuncio de la victoria que “no es toda la intención” de Trump en mantener la promesa de campaña por la antigua ciudad.
Jason Greenblatt, director legal de la campaña de Trump, dijo que en los próximos años”, habrá una ruptura radical en relación a la posición de Estados Unidos desde hace mucho tiempo los constructores israelíes, en áreas capturadas en la Guerra de los Seis Días de 1967, se han tornado más difíciles para llegar a un acuerdo de paz con los palestinos”.
En una entrevista esta semana en el New York Times, Trump reiteró que están decididos a llegar a una “solución definitiva” al conflicto entre israelíes y palestinos “por el bien de la humanidad”.
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