El aumento de la fe cristiana fue más notable entre los grupos minoritarios en Nepal, como Kirats y Dalits, es decir, aquellos que pertenecen a la casta más baja.
Los datos de la Federación de cristianos Nacionales en Nepal (FNCN, por sus siglas en inglés) estiman que el 60% de los cristianos nepaleses son dalits, la casta la conforman 30 millones de población en el país.
Dil Maya, de 70 años, es uno de los Dalits que se convirtió al cristianismo después de ver la curación milagrosa de su marido.
“Mi marido Dhan Bahadur estaba muy enfermo y ningún médico podía curarlo. Alguien me dijo que buscara una iglesia y orara, y así es como llegué aquí”, dijo Maya.
“Dios sanó a mi marido y me sentí curada también porque, por primera vez en mi vida me sentí aceptada por una comunidad. Nadie me aceptó antes. Me siento aceptada aquí”, dijo.
Sin embargo, no todos los nuevos conversos al cristianismo en Nepal pertenecen a la casta más baja.
Shah, por ejemplo, provenía de una familia noble y también se convirtió al cristianismo.
“Antes yo era un jugador, luchador, un usuario del alcohol y drogas. Yo solía golpear a la gente. Yo era terrible”, admitió Shah, que tuvo su encuentro con Cristo en el año 2005.
El sentimiento de pertenencia al Cuerpo de Cristo fue una de las mejores experiencias de Shah. “Una cosa que me gusta de los cristianos es que ellos creen que todos pertenecen a una misma familia”, dijo.
De acuerdo con el secretario general de FNCN, Chandra Man Nepali, el terremoto que afectó a Nepal en abril del año 2015, ayudó a crecer el cristianismo en el país.
“Cada vez que el gobierno no podía llegar a algún lugar, había cristianos allí. Llegamos a algunos distritos con alimentos, agua y suministros médicos. Tuvimos la financiación de las iglesias desde el exterior. De esta manera, los cristianos fueron más útil a la sociedad”, dijo Chandra.
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