Denzel Washington es no sólo un actor que ganó el premio de la Academia en dos ocasiones, sino un sirviente de Dios. En una entrevista con el obispo T.D. Jakes, la semana pasada, Washington, dijo que, en esta etapa de su carrera, se centra en servir a los demás.
“Estoy en el proceso de servir al pueblo”, dijo en el programa “TD Jakes Show”. “No necesito todo esto. Estoy aquí para servir a Dios y para servir a mi familia”, dijo.
“Agradezco por las bendiciones todos los días, todos los días abrazo a la gratitud, animo a otros a hacer lo mismo. Es imposible estar agradecido y tener odio en su corazón al mismo tiempo”, dijo en su discurso antes de orar por los demás.Jakes expresó gran emoción al enterarse de que Washington había asistido a sus sermones en línea por el sitio web de la Iglesia La Casa del Alfarero en Dallas, Texas (EE.UU.). “Uno de sus sermones decía que mi enemigo es mi interior y lo tengo en mi cabeza”, dijo Washington a Jakes, citando un ejemplo de la forma de cómo él fue impactado por el pastor. El actor es el hijo de un pastor que condujo la Iglesia de Dios en Cristo. El año pasado, habló en el informe anual “We Care” acerca de honrar a Dios con gratitud.
Washington hizo un enfoque creativo para hablar de su disciplina espiritual: “Antes de dormir, coloque sus zapatillas debajo de la cama de modo que cuando me levante por la mañana, usted tiene que ponerse de rodillas para encontrarlas y cuando estés allí, inicie el día con una oración. Pida sabiduría. Pida entendimiento”. El actor también reveló que Dios siempre ha sido el centro de su vida, incluso cuando no era fiel. “Nunca hubo un momento en que Dios no me haya dirigido, protegido y corregido”, dijo. “Puede haber habido momentos en que yo no fui fiel a Él, pero Él tenía fe en mí”.
La experiencia con Espíritu Santo
En una entrevista anterior con la revista GQ, Washington habló de su experiencia con el Espíritu Santo en un evento que cambió su vida. “Eso fue hace 30 años, asistí a la iglesia. El pastor predicaba ‘simplemente déjale que Él actúe'”, recuerda Washington. “Yo dije”: ‘Voy a dejarlo’ y tuve esta experiencia física y espiritual tremenda”, dijo. El encuentro provocó temor del Señor en el corazón del actor. “Él me asustó”, bromea. “Estaba babeando, llorando, el sudando. Mis mejillas explotaron. Yo me estaba liberando. Fue muy intenso”, recordó.
0 comentarios:
Publicar un comentario